Fondare 306 Risultati per: puerta estrecha

  • Ha temblado por sus bienes la población de Marot. Porque la desgracia ha bajado de parte del Señor hasta la puerta de Jerusalén. (Miqueas 1, 12)

  • El que abre camino sube a la vanguardia, los demás se abren camino, franquean la puerta y salen por ella: ¡su rey pasa al frente de ellos, el Señor marcha a la cabeza! (Miqueas 2, 13)

  • Aquel día -oráculo del Señor- se oirá un clamor desde la puerta de los Peces, un alarido desde la Ciudad nueva y un gran estruendo desde las colinas. (Sofonías 1, 10)

  • Todo el país se convertirá en una llanura, desde Gueba hasta Rimón, al sur de Jerusalén. Y esta será encumbrada y habitada en su mismo lugar, desde la puerta de Benjamín hasta el lugar de la puerta Antigua, es decir, hasta la puerta de los Ángulos, y desde la torre de Jananel hasta los Lagares del rey. (Zacarías 14, 10)

  • Tú, en cambio, cuando ores, retírate a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6, 6)

  • Entren por la puerta estrecha, porque es ancha la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que van por allí. (Mateo 7, 13)

  • Pero es angosta la puerta y estrecho el camino que lleva a la Vida, y son pocos los que lo encuentran. (Mateo 7, 14)

  • Así también, cuando vean todas estas cosas, sepan que el fin está cerca, a la puerta. (Mateo 24, 33)

  • Mientras tanto, llegó el esposo: las que estaban preparadas entraron con él en la sala nupcial y se cerró la puerta. (Mateo 25, 10)

  • Al retirarse hacia la puerta, lo vio otra sirvienta y dijo a los que estaban allí: «Este es uno de los que acompañaban a Jesús, el Nazareno». (Mateo 26, 71)

  • y la ciudad entera se reunió delante de la puerta. (Marcos 1, 33)

  • Se reunió tanta gente, que no había más lugar ni siquiera delante de la puerta, y él les anunciaba la Palabra. (Marcos 2, 2)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina