Fondare 403 Risultati per: llegó
Apenas llegó Joab con toda la tropa que lo acompañaba, fueron a decirle: "Abner, hijo de Ner, vino a ver al rey y este lo dejó partir en paz". (II Samuel 3, 23)
Todo el pueblo trató de obligar a David a que comiera algo cuando aún era de día, pero David pronunció este juramento: "¡Que Dios me castigue una y otra vez, si llego a probar pan o cualquier otro bocado antes de la puesta del sol!". (II Samuel 3, 35)
Jonatán, hijo de Saúl, tenía un hijo lisiado de ambos pies. Este era un niño de cinco años cuando llegó de Izreel la noticia de la muerte de Saúl y Jonatán. Su niñera lo tomó consigo y huyó; pero lo hizo con tanta precipitación, que el niño se cayó y quedó rengo. Su nombre era Meribaal. (II Samuel 4, 4)
David tomó otras concubinas y esposas después que llegó de Hebrón, y le nacieron más hijos e hijas. (II Samuel 5, 13)
Pero aquella misma noche, la palabra del Señor llegó a Natán en estos términos: (II Samuel 7, 4)
Cuando informaron de esto a David, él concentró a todo Israel, cruzó el Jordán y llegó a Helám. Los arameos tomaron posiciones frente a David y le libraron batalla. (II Samuel 10, 17)
Pero llegó un viajero a la casa del hombre rico, y este no quiso sacrificar un animal de su propio ganado para agasajar al huésped que había recibido. Tomó en cambio la oveja del hombre pobre, y se la preparó al que le había llegado de visita". (II Samuel 12, 4)
Era tal su ansiedad, que llegó a enfermarse a causa de su hermanastra Tamar, porque como la joven era virgen, a Amnón le parecía imposible llevar a cabo algo con ella. (II Samuel 13, 2)
Jusai, el amigo de David, llegó a la ciudad al mismo tiempo que Absalón entraba en Jerusalén. (II Samuel 15, 37)
Cuando Jusai, el arquita, el amigo de David, llegó a donde estaba Absalón, le dijo: "¡Viva el rey! ¡Viva el rey!". (II Samuel 16, 16)
David llegó a Majanaim, mientras Absalón cruzaba el Jordán con todos los hombres de Israel. (II Samuel 17, 24)
Y cuando David llegó a Majanaim, Sobí, hijo de Najás, el de Rabá de los amonitas, Maquir, hijo de Amiel, el de Lo Dabar, y Barzilai, el galaadita de Roglím, (II Samuel 17, 27)