Fondare 341 Risultati per: familia real

  • Los descendientes de Bela fueron Esbón, Uzí, Uziel, Ierimot e Irí: cinco en total; eran jefes de familia y hombres valerosos. Todos estaban registrados y su número era de 22.034. (I Crónicas 7, 7)

  • Todos estos fueron hijos de Iediael, jefes de familia y hombres valerosos; su número era de 17.200, aptos para combatir en la guerra. (I Crónicas 7, 11)

  • Después se unió a su mujer, la cual concibió y dio a luz un hijo, al que llamó Beriá, por la desgracia que había sufrido su familia. (I Crónicas 7, 23)

  • Los hijos de Ehúd, los jefes de familia de los que vivían en Gueba y a los que hicieron emigrar a Manájat, (I Crónicas 8, 6)

  • Ieús, Saquías y Mirmá. Estos fueron sus hijos, jefes de familia. (I Crónicas 8, 10)

  • Beriá y Semá fueron jefes de familia de los habitantes de Aialón, los que obligaron a huir a los habitantes de Gat. (I Crónicas 8, 13)

  • Estos eran los jefes de familia según sus listas genealógicas, y habitaban en Jerusalén. (I Crónicas 8, 28)

  • Salúm, hijo de Coré, hijo de Ebiasaf, hijo de Córaj, y sus hermanos los corajitas, de la misma familia. Ellos se ocupan del culto como guardianes de los umbrales de la Carpa, porque sus padres habían tenido a su cargo la guardia de acceso al campamento del Señor. (I Crónicas 9, 19)

  • y Sadoc, joven guerrero valeroso, con veintidós jefes de su familia. (I Crónicas 12, 29)

  • y les dijo: "Ustedes son los jefes de la familia de los levitas. Santifíquense, ustedes y sus hermanos, para subir el Arca del Señor, el Dios de Israel, al lugar que yo le he preparado. (I Crónicas 15, 12)

  • David dijo entonces a Ornán: "Cédeme el terreno de la era para edificar en él un altar al Señor; entrégamelo por su valor real, y así cesará la plaga que azota a mi pueblo". (I Crónicas 21, 22)

  • Pero el rey David dijo a Ornán: "¡De ninguna manera! La compraré por su precio real en plata, porque no voy a tomar para el Señor lo que te pertenece, ni voy a ofrecer un holocausto que no cuesta nada". (I Crónicas 21, 24)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina