Fondare 100 Risultati per: estén
Los tres distritos de la provincia de Samaría, incorporados a Judea, quedarán anexados definitivamente a ella y considerados como parte suya, de manera que dependan de un solo jefe y no estén sometidos a otra autoridad que la del Sumo Sacerdote. (I Macabeos 10, 38)
y que al fin tengas que gemir, cuando estén consumidos tu cuerpo y tu carne. (Proverbios 5, 11)
sus ramas serán quebradas cuándo todavía estén tiernas, sus frutos serán inservibles: no estarán maduros para ser comidos ni prestarán ninguna utilidad. (Sabiduría 4, 5)
Yo dije: "¿Hasta cuándo, Señor?". Él respondió: "Hasta que las ciudades queden devastadas, sin habitantes, hasta que las casas estén sin un hombre y el suelo devastado sea una desolación. (Isaías 6, 11)
¡Presten oído y escuchen mi voz, estén atentos y oigan mi palabra! (Isaías 28, 23)
Aunque sus jefes estén en Soán y sus mensajeros hayan llegado a Janés, (Isaías 30, 4)
¡Oigan cómo estoy gimiendo, sin que nadie me consuele! Todos mis enemigos, al oír mi desgracia, se alegraron de lo que has hecho. ¡Que llegue el Día que tú has anunciado, y que ellos estén igual que yo! (Lamentaciones 1, 21)
Pero yo dejaré mi resto. Y cuando los que se hayan librado de la espada estén en medio de las naciones, cuando ustedes sean dispersados entre los pueblos, (Ezequiel 6, 8)
Y ustedes sabrán que yo soy el Señor, cuando sus cadáveres estén en medio de sus ídolos, alrededor de sus altares, en toda colina elevada y en todas las cumbres de las montañas, bajo todo árbol frondoso y bajo todo terebinto tupido, allí mismo donde ofrecían perfume agradable a todos sus ídolos. (Ezequiel 6, 13)
cambiaré sus fiestas en duelo y todos sus cantos en lamentaciones; haré que todos se ciñan un sayal y que se rapen todas las cabezas; haré que estén de duelo como por un hijo único, y su final será como un día de amargura. (Amós 8, 10)
Aquel día, los profetas se avergonzarán cada uno de su visión, mientras estén profetizando, y no se pondrán más el manto de pelos para engañar. (Zacarías 13, 4)
Y el Señor castigará a todos los pueblos que hayan hecho la guerra contra Jerusalén con esta plaga: hará que se pudra su carne cuando todavía estén en pie, sus ojos se pudrirán en sus órbitas y su lengua dentro de su boca. (Zacarías 14, 12)
