Fondare 50 Risultati per: María
Después fue a llamar a María, su hermana, y le dijo en voz baja: «El Maestro está aquí y te llama». (Juan 11, 28)
Los judíos que estaban en la casa consolando a María, al ver que esta se levantaba de repente y salía, la siguieron, pensando que iba al sepulcro para llorar allí. (Juan 11, 31)
María llegó a donde estaba Jesús y, al verlo, se postró a sus pies y le dijo: «Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto». (Juan 11, 32)
Al ver lo que hizo Jesús, muchos de los judíos que habían ido a casa de María creyeron en él. (Juan 11, 45)
María, tomando una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, ungió con él los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. La casa se impregnó con la fragancia del perfume. (Juan 12, 3)
Junto a la cruz de Jesús, estaba su madre y la hermana de su madre, María, mujer de Cleofás, y María Magdalena. (Juan 19, 25)
El primer día de la semana, de madrugada, cuando todavía estaba oscuro, María Magdalena fue al sepulcro y vio que la piedra había sido sacada. (Juan 20, 1)
María se había quedado afuera, llorando junto al sepulcro. Mientras lloraba, se asomó al sepulcro (Juan 20, 11)
Ellos le dijeron: «Mujer, ¿por qué lloras?». María respondió: «Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo han puesto». (Juan 20, 13)
Jesús le dijo: «¡María!». Ella lo reconoció y le dijo en hebreo: «¡Raboní!», es decir, «¡Maestro!». (Juan 20, 16)
María Magdalena fue a anunciar a los discípulos que había visto al Señor y que él le había dicho esas palabras. (Juan 20, 18)
Todos ellos, íntimamente unidos, se dedicaban a la oración, en compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus hermanos. (Hechos 1, 14)