Fondare 119 Risultati per: Ayuda

  • Si un rico resbala, muchos corren en su ayuda; dice cosas irrepetibles, y le dan la razón. Resbala el humilde, y lo critican; se expresa con sensatez, y nadie le hace caso. (Eclesiástico 13, 22)

  • El que practica la misericordia presta a su prójimo, y el que acude en su ayuda observa los mandamientos. (Eclesiástico 29, 1)

  • El que adquiere una mujer tiene el comienzo de la fortuna, una ayuda adecuada a él y una columna donde apoyarse. (Eclesiástico 36, 24)

  • La riqueza y la fuerza reconfortan el corazón, pero más todavía el temor del Señor. Con el temor del Señor, nada falta, y ya no es necesario buscar otra ayuda. (Eclesiástico 40, 26)

  • porque tú has sido mi protector y mi ayuda, y has librado mi cuerpo de la perdición, del lazo de la lengua calumniadora y de los labios que traman mentiras. Frente a mis adversarios, tú has sido mi ayuda y mes has librado, (Eclesiástico 51, 2)

  • todos ellos serán defraudados por un pueblo que no sirve de nada, que no les aporta ayuda ni provecho, sino vergüenza y oprobio. (Isaías 30, 5)

  • ¡Egipto! Su ayuda es inútil y vana; por eso yo lo llamé: "Rahab, la inmóvil". (Isaías 30, 7)

  • ¡Ay de los que bajan a Egipto para pedir ayuda, y buscan apoyo en los caballos! Ellos confían en los carros, porque son numerosos, y en los jinetes, porque son muy fuertes, pero no miran al Santo de Israel ni consultan al Señor. (Isaías 31, 1)

  • Sin embargo, él también es sabio: hace venir la desgracia y no revoca su palabra, se levanta contra la casa de los malvados y contra la ayuda de los malhechores. (Isaías 31, 2)

  • Los egipcios son hombres y no dioses, sus caballos son carne y no espíritu. Cuando el Señor extienda su mano, tropezará el que ayuda, y caerá el que es ayudado, y todos juntos desaparecerán. (Isaías 31, 3)

  • Porque yo, el Señor, soy tu Dios, el que te sostengo de la mano derecha y te digo: "No temas, yo vengo en tu ayuda". (Isaías 41, 13)

  • Tú eres un gusano, Jacob, eres una lombriz, Israel, pero no temas, yo vengo en tu ayuda -oráculo del Señor- y tu redentor es el Santo de Israel. (Isaías 41, 14)


“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina