Fondare 560 Risultati per: Aquel
No hagas ningún pacto con los habitantes de aquel país, no sea que cuando ellos se prostituyan con sus dioses y les ofrezcan sacrificios, te inviten también a ti y tengas que comer de las víctimas sacrificadas. (Exodo 34, 15)
Esta es la ofrenda que Aarón y sus hijos harán al Señor, el día en que aquel reciba la unción: Presentarán la décima parte de una medida de harina de la mejor calidad -la mitad por la mañana y la mitad por la tarde- como oblación perpetua. (Levítico 6, 13)
El sacerdote que tiene la preeminencia entre sus hermanos, aquel sobre cuya cabeza fue derramado el óleo de la unción y que recibió la investidura para usar los ornamentos, no llevará los cabellos sueltos ni rasgará sus vestiduras; (Levítico 21, 10)
Ellos confesarán el pecado que han cometido y restituirán la suma total a aquel a quien ocasionaron el perjuicio, añadiendo además una quinta parte de su valor. (Números 5, 7)
Sin embargo, había algunas personas que se encontraban en estado de impureza a causa de un cadáver y no pudieron celebrar la Pascua ese día. Por eso se presentaron a Moisés y a Aarón aquel mismo día (Números 9, 6)
Aquel lugar fue llamado Taberá -que significa Incendio- porque allí se había encendido el fuego del Señor contra los israelitas. (Números 11, 3)
pongan fuego en ellos, y mañana échenles incienso en la presencia del Señor. Aquel a quien el Señor elija será el consagrado. ¡Ustedes, hijos de Leví, se han excedido en sus atribuciones!". (Números 16, 7)
Para aquel que es impuro, se tomará un poco de ceniza de la víctima quemada para la purificación, y se la mezclará con agua viva dentro de un recipiente. (Números 19, 17)
El Señor oyó la súplica de Israel y les entregó a los cananeos, que fueron consagrados al exterminio, junto con sus ciudades. Por eso aquel lugar se llamó Jormá. (Números 21, 3)
los moabitas dijeron a los ancianos de Madián: "Ahora esta turba va a devorarlo todo a nuestro alrededor como un buey devora la hierba del campo". Entonces Balac, hijo de Sipor, que era rey de Moab en aquel tiempo, (Números 22, 4)
Después de lo cual la tierra abrió sus fauces y los devoró junto con Coré, cuando murió aquel grupo y el fuego devoró a los doscientos cincuenta hombres, para que sirvieran de escarmiento. (Números 26, 10)
Por eso, aquel día el Señor se indignó y pronunció este juramento: (Números 32, 10)