Fondare 56 Risultati per: reunión sagrada
Eliminó también de su país al resto de los afeminados que se dedicaban a la prostitución sagrada y que Asá no había suprimido. (1 Reyes 22, 47)
Ejercían el ministerio de cantores ante la Morada de la Tienda de Reunión, hasta que Salomón edificó la Casa de Yavé en Jerusalén. Cumplían su servicio conforme a su reglamento. (1 Crónicas 6, 17)
Zacarías, hijo de Meselemías, era portero de la entrada de la Tienda de Reunión. (1 Crónicas 9, 21)
guardando en el servicio de la Casa de Yavé el ritual de la Tienda de Reunión, el ritual del santuario y el ritual de los hijos de Aarón, sus hermanos. (1 Crónicas 23, 32)
Después de la reunión, Ozías lo invitó a su casa y ofreció un banquete a los dirigentes. Durante toda la noche pidieron la ayuda del Dios de Israel. (Judit 6, 21)
Por eso, los días catorce y quince del mes de Adar serán, en adelante, días de reunión, de alegría y de fiesta delante de Dios para su pueblo Israel, desde ahora y para siempre.» El año cuarto del reinado de Tolomeo y Cleopatra, Dositeo, que se decía sacerdote y levita, junto con su hijo Tolomeo, trajeron la presente carta sobre los Purim, diciendo que era auténtica y que había sido traducida por Lisímaco, hijo de Tolomeo, que vivía en Jerusalén. (Ester 10, 13)
Bien sé que me conduces a la muerte, al lugar de reunión de todos los vivientes. (Job 30, 23)
¡Aleluya! Doy gracias al Señor de todo corazón en la reunión de los justos y en la asamblea. (Salmos 111, 1)
No estaría permitido a ninguno del pueblo o de los sacerdotes actuar en contra de estas disposiciones ni contradecir sus órdenes, o hacer reunión pública sin su consentimiento, ni vestir púrpura o llevar el prendedor de oro. (1 Macabeos 14, 44)
Al que ha robado alguna cosa sagrada o ha cometido algún otro crimen horrendo, lo suben arriba y de allí lo precipitan. (2 Macabeos 13, 6)
Israel era la cosa sagrada de Yavé, la parte mejor de su cosecha. Quien comiera de sus frutos tenía que pagar y pronto le venía la desgracia -palabra de Yavé. (Jeremías 2, 3)
Pero, ¿quién de ellos ha asistido a una reunión con Yavé? ¿Quién ha visto y oído su palabra? ¿Quién se ha fijado en sus palabras para transmitirlas? (Jeremías 23, 18)