Fondare 78 Risultati per: destrucción de altares

  • Fuiste vendido a las naciones, pero no para tu destrucción. Por haber provocado la cólera de Dios fuiste entregado a tus enemigos. (Baruc 4, 6)

  • Sus altares serán derribados, sus altares para el perfume serán rotos. Haré que sus habitantes sean masacrados delante de sus ídolos. (Ezequiel 6, 4)

  • ( ) Dispersaré sus huesos alrededor de sus altares. (Ezequiel 6, 5)

  • Doquiera ustedes habiten, serán devastadas las ciudades y derribados los Altos Lugares, sus altares serán abandonados, sus ídolos rotos, sus altares para el perfume destruidos. (Ezequiel 6, 6)

  • Sabrán que soy Yavé cuando los muertos se amontonen al lado de los ídolos, cerca de sus altares, en todas las colinas elevadas, bajo cualquier árbol verde y bajo cualquier frondosa encina, doquiera hayan ofrecido a sus porquerías el buen olor del incienso. (Ezequiel 6, 13)

  • Esto dice Yavé: Mi cólera desencadena un viento tempestuoso, mi furor envía la lluvia torrencial, mi rabia lanza los granizos de la destrucción. (Ezequiel 13, 13)

  • El que avanza contra él lo tratará a su antojo; sin que nadie pueda resistirle, se establecerá en la Tierra Santa, llevando la destrucción en sus manos. (Daniel 11, 16)

  • Efraím multiplicó los altares, pero éstos sólo le han servido para pecar. (Oseas 8, 11)

  • Israel era una viña excelente que daba uva en abundancia. Cuanto más eran loos frutos, más multiplicaba sus altares; mientras mejor le iba al país, más embellecía sus pilares sagrados. (Oseas 10, 1)

  • Su cariño está repartido, pero me lo van a pagar. Yavé mismo derribará sus altares y demolerá sus monumentos sagrados. (Oseas 10, 2)

  • Los santuarios altos de Aven, donde pecaba Israel, serán destruidos; zarzas y cardos cubrirán sus altares. Entonces dirán a las montañas: «Escóndannos», y a los cerros: «Caigan sobre nosotros». (Oseas 10, 8)

  • Si Galaad no es más que pecado, ellos no son más que mentira; en Guilgal ofrecen sus sacrificios a los terneros; por eso sus altares no serán más que piedras esparcidas en el campo. (Oseas 12, 12)


“O homem sem Deus é um ser mutilado”. São Padre Pio de Pietrelcina