Fondare 175 Risultati per: conmigo

  • Veo que me has hecho un gran favor y que has sido muy bueno conmigo conservándome la vida. Pero yo no puedo llegar hasta la montaña sin que me alcance el desastre y la muerte. (Génesis 19, 19)

  • Por eso júrame ahora mismo ante Dios que no me harás daño, ni a mí, ni a mis hijos, ni a mis descendientes, sino que usarás conmigo y con esta tierra en la que habitas, la misma bondad que yo he usado contigo.» (Génesis 21, 23)

  • El servidor le respondió: «Y si la mujer no quiere venir conmigo a esta tierra, ¿tendré que llevar a tu hijo a la tierra de donde saliste?» (Génesis 24, 5)

  • Labán dijo: «Mejor te la doy a ti y no a cualquier otro hombre. Quédate, pues, conmigo.» (Génesis 29, 19)

  • Cuando por la tarde llegaba Jacob del campo, Lía salió a su encuentro y le dijo: «Esta noche dormirás conmigo, pues te he alquilado por unas manzanas de mi hijo.» (Génesis 30, 16)

  • Y dijo: «Me ha hecho Dios un buen regalo. Ahora mi marido cohabitará conmigo, porque le he dado seis hijos.» Y le llamó Zabulón. (Génesis 30, 20)

  • Jacob respondió: «Tú sabes cómo te he servido, y cómo le fue a tu rebaño conmigo. (Génesis 30, 29)

  • y les dijo: «Veo que el padre de ustedes no me mira con buenos ojos como antes, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo. (Génesis 31, 5)

  • Yo no soy digno de todos los favores que me has hecho, ni de la gran bondad que has tenido conmigo. Porque al partir, cuando atravesé el Jordán, no tenía más que mi bastón. Pero ahora, al volver, tengo suficiente como para hacer dos campamentos. (Génesis 32, 11)

  • José era muy varonil y de buena presencia. Algún tiempo después, la esposa de su amo puso sus ojos en él, y le dijo: «Acuéstate conmigo.» (Génesis 39, 7)

  • La mujer lo agarró de la ropa diciendo: «Vamos, acuéstate conmigo.» Pero él, dejándole su ropa en la mano, salió afuera corriendo. (Génesis 39, 12)

  • Entonces el señor del país, nos dijo: "Para que yo pueda comprobar si ustedes dicen la verdad, se va a quedar conmigo uno de ustedes; mientras tanto tomen lo que hace falta en sus casas y márchense. (Génesis 42, 33)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina