Fondare 90 Risultati per: angustia

  • Obra conmigo como quieras, quítame la vida y conviérteme en polvo, porque prefiero la muerte a la vida. Ordena que la vida me abandone; de esa manera líbrame haciendo que vuelva al polvo. En realidad, la muerte es mejor para mí que la vida, después de oír esos injustos reproches que me han dejado tan amargado. Ordena, Señor, que me libren de esta angustia y déjame llegar a la eternidad. Señor, no apartes de mí tu rostro.» (Tobías 3, 6)

  • El Señor oyó su voz y comprendió su angustia. El pueblo ayunó muchos días en Judá y Jerusalén ante el Templo del Señor Omnipotente. (Judit 4, 13)

  • para recordar que en esos días los judíos se habían librado de sus enemigos y que, en ese mes, su angustia se había cambiado en felicidad y su duelo en día de fiesta. Los convidaba, pues, a que ese día lo pasaran alegremente, se enviaran regalos unos a otros y dieran limosna a los pobres. (Ester 9, 22)

  • La pena, la angustia, el peligro, el miedo se cernía sobre la tierra. Temblando de pavor ante la desgracia que los amenazaba, los justos, resignados a morir, invocaban a Dios. (Ester 11, 8)

  • Seis veces te librará de la angustia. y a la séptima el mal no te alcanzará. (Job 5, 19)

  • Sabe que se acerca el día sin luz, ansiedad y angustia lo vienen a asaltar su mal es peor que si un rey lo atacase. (Job 15, 24)

  • Una flecha le sale por la espalda la punta atravesó su hígado. Lo invade una angustia mortal, (Job 20, 25)

  • Sin embargo, contra el pobre no levantaba mi mano cuando en su angustia clamaba a mí. (Job 30, 24)

  • También a ti te librará de la angustia. una abundancia sin límites la reemplazará, y tu mesa rebosará de sabrosos manjares. (Job 36, 16)

  • que guardo yo para los días de angustia, para el día de la guerra y del combate? (Job 38, 23)

  • ¡Cuando llamo, respóndeme, Dios mi defensor! En la angustia tú me has dado sosiego: ten compasión de mí y escucha mi oración. (Salmos 4, 2)

  • El Señor es un bastión para el oprimido, un refugio para los tiempos de angustia. (Salmos 9, 10)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre todo o bem que ela ainda pode fazer”. São Padre Pio de Pietrelcina