Fondare 41 Risultati per: Cartas

  • Se les dio cartas de recomendación para las autoridades de cada país, a fin de que éstos los encaminaran sanos y salvos a la tierra de Judá. (1 Macabeos 12, 4)

  • Esta es la copia de las cartas que Jonatán escribió a los espartanos: (1 Macabeos 12, 5)

  • Ya hace tiempo, nuestro sumo sacerdote Onías recibió de Ario, rey de ustedes, cartas en que decía que son hermanos nuestros, como lo certifica la adjunta copia. (1 Macabeos 12, 7)

  • Las cartas fueron leídas en Jerusalén ante toda la asamblea. Esta es la copia de la que enviaron los espartanos: (1 Macabeos 14, 19)

  • Entonces llegaron de Roma Neumenio y sus colegas, trayendo cartas dirigidas a los reyes y a las naciones, (1 Macabeos 15, 15)

  • Al sumo sacerdote Simón le mandaron copias de estas cartas. (1 Macabeos 15, 24)

  • Tolomeo se apresuró después a enviar cartas al rey para informarlo de lo sucedido y pedirle el envío de fuerzas y socorro con los cuales le entregaría las ciudades y el país. (1 Macabeos 16, 18)

  • Este hecho se leía también en los archivos y en las Memorias del tiempo de Nehemías. Ahí contaban que Nehemías inició una biblioteca y reunió los libros referentes a los reyes y a los profetas, los de David y las cartas de los reyes relativas a las ofrendas. (2 Macabeos 2, 13)

  • En aquel tiempo, Merodac-Baladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia, mandó cartas y un regalo a Ezequías al enterarse de su enfermedad y de su curación. (Isaías 39, 1)

  • despachó en su propio nombre cartas al sacerdote Sofonías, hijo de Masaya, que decían: (Jeremías 29, 25)

  • esto lo saben muy bien el sumo sacerdote y el Consejo de los Ancianos. Incluso me entregaron cartas para nuestros hermanos de Damasco, y salí para detener a los cristianos que allí había y traerlos encadenados a Jerusalén para que fueran castigados. (Hecho de los Apóstoles 22, 5)

  • Pero ¿voy a recomendarme otra vez? ¿Debería acaso llevar cartas de recomendación de ustedes o para ustedes, como hacen otros? (2º Carta a los Corintios 3, 1)


“A mulher forte é a que tem temor de Deus, a que mesmo à custa de sacrifício faz a vontade de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina