47. Si el forastero o huésped que mora contigo adquiere bienes, y, en cambio, tu hermano se empobrece en asuntos con él y se vende al forastero, al que mora contigo, o a algún descendiente de familia de forastero,





“Seja paciente nas aflições que o Senhor lhe manda.” São Padre Pio de Pietrelcina