I Reyes, 11
12. No lo haré sin embargo en vida tuya por causa de David tu padre; lo arrancaré de mano de tu hijo.
12. No lo haré sin embargo en vida tuya por causa de David tu padre; lo arrancaré de mano de tu hijo.
“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina