27. los que dicen a un trozo de madera: "¡Tú me has dado a luz!". Porque ellos me vuelven la espalda, no la cara, y después, en el tiempo de su desgracia, dicen: "¡Levántate y sálvanos!".





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina