24. Pero Menelao, una vez presentado ante el rey, lo impresionó con su aire majestuoso y logró hacerse investir del sumo sacerdocio, ofreciéndole trescientos talentos de plata más que Jasón.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina