Talált 75 Eredmények: tropa

  • Abías y su tropa les causaron una gran derrota; cayeron 500.000 hombres escogidos de Israel. (II Crónicas 13, 17)

  • Respondió Amasías al hombre de Dios: «¿Y qué hacer con los cien talentos que he dado a la tropa de Israel?» Contestó el hombre de Dios: «Tiene Yahveh poder para darte mucho más que eso.» (II Crónicas 25, 9)

  • Entretanto, la tropa que Amasías había hecho volver, para que no fuesen con él a la guerra, se desparramaron por las ciudades de Judá, desde Samaría hasta Bet Jorón, pero fueron derrotados 3.000 de ellos y se recogió mucho botín. (II Crónicas 25, 13)

  • Entonces la tropa dejó a los prisioneros y el botín delante de los jefes y de toda la asamblea. (II Crónicas 28, 14)

  • Pues me daba vergüenza solicitar del rey tropa y gente de a caballo para protegernos del enemigo en el camino; por el contrario, habíamos declarado al rey: «La mano de nuestro Dios está, para bien, con todos los que le buscan; y su poder y su cólera sobre todos los que le abandonan.» (Esdras 8, 22)

  • Entró luego en la tienda en que se había aposentado Judit, y al no verla, se precipitó hacia la tropa gritando: (Judit 14, 17)

  • Vinieron los asirios de los montes del norte, vinieron con tropa innumerable; su muchedumbre obstruía los torrentes, y sus caballos cubrían las colinas. (Judit 16, 3)

  • Les indicaba el camino y me ponía al frente, me asentaba como un rey en medio de su tropa, y por doquier les guiaba a mi gusto. (Job 29, 25)

  • La gente del rey y la tropa que estaba en Jerusalén, en la Ciudad de David, recibieron la denuncia de que unos hombres que habían rechazado el mandato del rey habían bajado a los lugares ocultos del desierto. (I Macabeos 2, 31)

  • Partió, pues, a su vez, y subió con él una poderosa tropa de impíos para ayudarle a tomar venganza de los hijos de Israel. (I Macabeos 3, 15)

  • Pasó a continuación a los ammonitas, donde encontró una fuerte tropa y una población numerosa cuyo jefe era Timoteo. (I Macabeos 5, 6)

  • Y dieron orden a la tropa que estaba bajo su mando de ir sobre Yamnia. (I Macabeos 5, 58)


“Não se fixe voluntariamente naquilo que o inimigo da alma lhe apresenta.” São Padre Pio de Pietrelcina