Talált 18 Eredmények: temblor
A Isaac le entró un temblor fuerte, y le dijo: «Pues entonces, ¿quién es uno que ha cazado una pieza y me le ha traído? Porque de hecho yo he comido antes que tú vinieses, y le he bendecido, y bendito está.» (Génesis 27, 33)
Le dijo: «Sal y ponte en el monte ante Yahveh.» Y he aquí que Yahveh pasaba. Hubo un huracán tan violento que hendía las montañas y quebrantaba las rocas ante Yahveh; pero no estaba Yahveh en el huracán. Después del huracán, un temblor de tierra; pero no estaba Yahveh en el temblor. (I Reyes 19, 11)
Después del temblor, fuego, pero no estaba Yahveh en el fuego. Después del fuego, el susurro de una brisa suave. (I Reyes 19, 12)
un temblor me entró, un escalofrío, que estremeció todos mis huesos... (Job 4, 14)
También es corregido por el dolor en su camilla, por el temblor continuo de sus huesos, (Job 33, 19)
con temblor besad sus pies; no se irrite y perezcáis en el camino, pues su cólera se inflama de repente. ¡Venturosos los que a él se acogen! (Salmos 2, 12)
Allí un temblor les invadió, espasmos como de mujer en parto, (Salmos 48, 7)
miedo y temblor me invaden, un escalofrío me atenaza. (Salmos 55, 6)
Aquel hombre estaba embargado de miedo y temblor en su cuerpo, con lo que mostraba a los que le contemplaban el dolor que había en su corazón. (II Macabeos 3, 17)
A Yahveh Sebaot, a ése tened por santo, sea él vuestro temor y él vuestro temblor. (Isaías 8, 13)
Se espantaron en Sión los pecadores, sobrecogió el temblor a los impíos: ¿Quién de nosotros podrá habitar con el fuego consumidor? ¿quién de nosotros podrá habitar con las llamas eternas? (Isaías 33, 14)
Hijo de hombre, comerás tu pan con temblor y beberás tu agua con inquietud y angustia; (Ezequiel 12, 18)