Talált 27 Eredmények: quitó
El fue quien quitó los altos, derribó las estelas, cortó los cipos y rompió la serpiente de bronce que había hecho Moisés, porque los israelitas le habían quemado incienso hasta aquellos días; se la llamaba Nejustán. (II Reyes 18, 4)
En aquella ocasión Ezequías quitó las puertas del santuario de Yahveh y los batientes que..., rey de Judá, había revestido de oro, y lo entregó al rey de Asiria. (II Reyes 18, 16)
Joaquín se quitó sus vestidos de prisión y comió siempre a la mesa en su presencia, todos los días de su vida. (II Reyes 25, 29)
Hijos de Judá: Er, Onán y Selá; los tres le nacieron de Bat Súa la cananea. Er, primogénito de Judá, era malo a los ojos de Yahveh, que le quitó la vida. (I Crónicas 2, 3)
Quitó de la Casa de Yahveh los dioses extraños, el ídolo y todos los altares que había erigido en el monte de la Casa de Yahveh y en Jerusalén, y los echó fuera de la ciudad. (II Crónicas 33, 15)
y luego, con ambas manos le quitó las escamas de la comisura de los ojos. (Tobías 11, 12)
se quitó el sayal que vestía, se desnudó de sus vestidos de viudez, se baño toda, se ungió con perfumes exquisitos, se compuso la cabellera poniéndose una cinta, y se vistió los vestidos que vestía cuando era feliz, en vida de su marido Manasés. (Judit 10, 3)
dijo: «Desnudo salí del seno de mi madre, desnudo allá retornaré. Yahveh dio, Yahveh quitó: ¡Sea bendito el nombre de Yahveh!» (Job 1, 21)
¿No mató de joven al gigante, y quitó el oprobio del pueblo, blandiendo en la mano la piedra de la honda y abatiendo la arrogancia de Goliat? (Eclesiástico 47, 4)
Así dice tu Señor Yahveh, tu Dios, defensor de tu pueblo. Mira que yo te quito de la mano la copa del vértigo, el cáliz de mi ira; ya no tendrás que seguir bebiéndolo. (Isaías 51, 22)
Joaquín se quitó sus vestidos de prisión y comió siempre en la mesa del rey, todos los días de su vida. (Jeremías 52, 33)
Pero habiéndose engreído su corazón y obstinado su espíritu hasta la arrogancia, fue depuesto de su trono real, y se le quitó su gloria. (Daniel 5, 20)