Talált 187 Eredmények: muy
Muy poco tiempo después, Lisias, tutor y pariente del rey, que estaba al frente de los negocios, muy contrariado por lo sucedido, (II Macabeos 11, 1)
Después de haber reunido entre sus hombres cerca de 2.000 dracmas, las mandó a Jerusalén para ofrecer un sacrificio por el pecado, obrando muy hermosa y noblemente, pensando en la resurrección. (II Macabeos 12, 43)
También Menelao se unió a ellos e incitaba muy taimadamente a Antíoco, no por salvar a su patria, sino con la idea de establecerse en el poder. (II Macabeos 13, 3)
Y muy justamente fue así, pues, después de haber cometido muchos pecados contra el altar, cuyo fuego y ceniza eran sagrados, en la ceniza encontró la muerte. (II Macabeos 13, 8)
Salió hacia Tolemaida; pero los habitantes de la ciudad estaban muy disgustados por este tratado: estaban en verdad indignados por los acuerdos, que ellos querían abolir. (II Macabeos 13, 25)
Razías, uno de los ancianos de Jerusalén, fue denunciado a Nicanor. Era hombre amante de sus conciudadanos, muy bien considerado, llamado por su buen corazón «Padre de los judíos», (II Macabeos 14, 37)
Porque no está el marido en casa, está de viaje muy lejos; (Proverbios 7, 19)
Muy alta está la sabiduría para el necio: no abre su boca en la puerta. (Proverbios 24, 7)
El hombre leal será muy bendecido, quien se hace rico aprisa, no quedará impune. (Proverbios 28, 20)
Dichoso también el eunuco que con sus manos no obra iniquidad ni fomenta pensamientos perversos contra el Señor; por su fidelidad se le dará una escogida recompensa, una herencia muy agradable en el Santurario del Señor. (Sabiduría 3, 14)
y juzgué muy necesario aportar yo también algún interés y esfuerzo para traducir este libro. (Eclesiástico 0, 30)
Muy dura es para los ignorantes, no aguanta en ella el mentecato. (Eclesiástico 6, 20)