Talált 14038 Eredmények: los
y saldrá a seducir a las naciones de los cuatro extremos de la tierra, a Gog y a Magog, y a reunirlos para la guerra, numerosos como la arena del mar. (Apocalipsis 20, 8)
Subieron por toda la anchura de la tierra y cercaron el campamento de los santos y de la Ciudad amada. Pero bajó fuego del cielo y los devoró. (Apocalipsis 20, 9)
Y el Diablo, su seductor, fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde están también la Bestia y el falso profeta, y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 20, 10)
Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie delante del trono; fueron abiertos unos libros, y luego se abrió otro libro, que es el de la vida; y los muertos fueron juzgados según lo escrito en los libros, conforme a sus obras. (Apocalipsis 20, 12)
Y el mar devolvió los muertos que guardaba, la Muerte y el Hades devolvieron los muertos que guardaban, y cada uno fue juzgado según sus obras. (Apocalipsis 20, 13)
Y oí una fuerte voz que decía desde el trono: «Esta es la morada de Dios con los hombres. Pondrá su morada entre ellos y ellos serán su pueblo y él Dios - con - ellos, será su Dios. (Apocalipsis 21, 3)
Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda. (Apocalipsis 21, 8)
Entonces vino uno de los siete Angeles que tenían las siete copas llenas de las siete últimas plagas, y me habló diciendo: «Ven, que te voy a enseñar a la Novia, a la Esposa del Cordero.» (Apocalipsis 21, 9)
Tenía una muralla grande y alta con doce puertas; y sobre las puertas, doce Angeles y nombres grabados, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel; (Apocalipsis 21, 12)
La muralla de la ciudad se asienta sobre doce piedras, que llevan los nombres de los doce Apóstoles del Cordero. (Apocalipsis 21, 14)
Los asientos de la muralla de la ciudad están adornados de toda clase de piedras preciosas: el primer asiento es de jaspe, el segundo de zafiro, el tercero de calcedonia, el cuarto de esmeralda, (Apocalipsis 21, 19)
Las naciones caminarán a su luz, y los reyes de la tierra irán a llevarle su esplendor. (Apocalipsis 21, 24)