Talált 291 Eredmények: lista de pueblos
la que has preparado a la vista de todos los pueblos, (Lucas 2, 31)
Un día que estaba enseñando, había sentados algunos fariseos y doctores de la ley que habían venido de todos los pueblos de Galilea y Judea, y de Jerusalén. El poder del Señor le hacía obrar curaciones. (Lucas 5, 17)
Y sucedió a continuación que iba por ciudades y pueblos, proclamando y anunciando la Buena Nueva del Reino de Dios; le acompañaban los Doce, (Lucas 8, 1)
Saliendo, pues, recorrían los pueblos, anunciando la Buena Nueva y curando por todas partes. (Lucas 9, 6)
Pero el día había comenzado a declinar, y acercándose los Doce, le dijeron: «Despide a la gente para que vayan a los pueblos y aldeas del contorno y busquen alojamiento y comida, porque aquí estamos en un lugar deshabitado.» (Lucas 9, 12)
Atravesaba ciudades y pueblos enseñando, mientras caminaba hacia Jerusalén. (Lucas 13, 22)
tú que has dicho por el Espíritu Santo, por boca de nuestro padre David, tu siervo: ¿A qué esta agitación de las naciones, estos vanos proyectos de los pueblos? (Hechos 4, 25)
«Porque verdaderamente en esta ciudad se han aliado Herodes y Poncio Pilato con las naciones y los pueblos de Israel contra tu santo siervo Jesús, a quien has ungido , (Hechos 4, 27)
Ellos, después de haber dado testimonio y haber predicado la Palabra del Señor, se volvieron a Jerusalén evangelizando muchos pueblos samaritanos. (Hechos 8, 25)
y de nuevo: Alabad, gentiles todos, al Señor y cántenle himnos todos los pueblos. (Romanos 15, 11)
Porque él es nuestra paz: el que de los dos pueblos hizo uno, derribando el muro que los separaba, la enemistad, (Efesios 2, 14)
Después miré y había una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y el Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. (Apocalipsis 7, 9)