Talált 50 Eredmények: leche

  • y les diste esta tierra que habías jurado darla a sus padres: tierra que mana leche y miel. (Jeremías 32, 22)

  • Zain. Más limpios que la nieve eran sus nazireos, más blancos que la leche; de cuerpo más rojo que corales, un zafiro su figura. (Lamentaciones 4, 7)

  • Por esto se nos han pegado los males y la maldición con que el Señor conminó a su siervo Moisés el día que sacó a nuestros padres del país de Egipto para darnos una tierra que mana leche y miel, como sucede en este día. (Baruc 1, 20)

  • Aquel día alcé mi mano hacia ellos jurando sacarlos del país de Egipto hacia una tierra que había explorado para ellos, que mana leche y miel, la más hermosa de todas las tierras. (Ezequiel 20, 6)

  • Y, una vez más alcé mi mano hacia ellos en el desierto, jurando que no les dejaría entrar en la tierra que les había dado, que mana leche y miel, la más hermosa de todas las tierras. (Ezequiel 20, 15)

  • por eso, he aquí que yo te entrego en posesión a los hijos de Oriente; emplazarán en ti sus campamentos, y pondrán en ti sus tiendas; ellos comerán tus frutos y ellos beberán tu leche. (Ezequiel 25, 4)

  • Vosotros os habéis tomado la leche, os habéis vestido con la lana, habéis sacrificado las ovejas más pingües; no habéis apacentado el rebaño. (Ezequiel 34, 3)

  • Sucederá aquel día que los montes destilarán vino y las colinas fluirán leche; por todas las torrenteras de Judá fluirán las aguas; y una fuente manará de la Casa de Yahveh que regará el valle de las Acacias. (Joel 4, 18)

  • Había en la Iglesia fundada en Antioquía profetas y maestros: Bernabé, Simeón llamado Níger, Lucio el cirenense, Manahén, hermano de leche del tetrarca Herodes, y Saulo. (Hechos 13, 1)

  • Os di a beber leche y no alimento sólido, pues todavía no lo podíais soportar. Ni aun lo soportáis al presente; (I Corintios 3, 2)

  • ¿Quién ha militado alguna vez a cosa propia? ¿Quién planta una viña y no come de sus frutos? ¿Quién apacienta un rebaño y no se alimenta de la leche del rebaño? (I Corintios 9, 7)

  • Pues debiendo ser ya maestros en razón del tiempo, volvéis a tener necesidad de ser instruidos en los primeros rudimentos de los oráculos divinos, y os habéis hecho tales que tenéis necesidad de leche en lugar de manjar sólido. (Hebreos 5, 12)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina