Talált 390 Eredmények: espada

  • Jesús dijo a Pedro: «Vuelve la espada a la vaina. La copa que me ha dado el Padre, ¿no la voy a beber?» (Juan 18, 11)

  • Hizo morir por la espada a Santiago, el hermano de Juan. (Hechos 12, 2)

  • Despertó el carcelero y al ver las puertas de la cárcel abiertas, sacó la espada e iba a matarse, creyendo que los presos habían huido. (Hechos 16, 27)

  • ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿La tribulación?, ¿la angustia?, ¿la persecución?, ¿el hambre?, ¿la desnudez?, ¿los peligros?, ¿la espada?, (Romanos 8, 35)

  • pues es para ti un servidor de Dios para el bien. Pero, si obras el mal, teme: pues no en vano lleva espada: pues es un servidor de Dios para hacer justicia y castigar al que obra el mal. (Romanos 13, 4)

  • Tomad, también, el yelmo de la salvación y la la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios; (Efesios 6, 17)

  • Ciertamente, es viva la Palabra de Dios y eficaz, y más cortante que espada alguna de dos filos. Penetra hasta las fronteras entre el alma y el espíritu, hasta las junturas y médulas; y escruta los sentimientos y pensamientos del corazón. (Hebreos 4, 12)

  • apagaron la violencia del fuego, escaparon del filo de la espada, curaron de sus infermedades, fueron valientes en la guerra, rechazando ejércitos extranjeros; (Hebreos 11, 34)

  • apedreados, torturados, aserrados, muertos a espada; anduvieron errantes cubiertos de pieles de oveja y de cabras; faltos de todo; oprimidos y maltratados, (Hebreos 11, 37)

  • Tenía en su mano derecha siete estrellas, y de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro, como el sol cuando brilla con toda su fuerza. (Apocalipsis 1, 16)

  • Al Angel de la Iglesia de Pérgamo escribe: Esto dice el que tiene la espada aguda de dos filos. (Apocalipsis 2, 12)

  • Arrepiéntete, pues; si no, iré pronto donde ti y lucharé contra ésos con la espada de mi boca. (Apocalipsis 2, 16)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina