Talált 421 Eredmények: cual

  • Hicieron, pues, volver a Moisés y a Aarón a la presencia de Faraón; el cual les dijo: «Id a dar culto a Yahveh, vuestro Dios. ¿Quiénes van a ir?» (Exodo 10, 8)

  • Dijo Yahveh a Moisés: «Todavía traeré una plaga más sobre Faraón y sobre Egipto; tras de lo cual os dejará marchar de aquí y cuando, por fin, os deje salir del país, él mismo os expulsará de aquí. (Exodo 11, 1)

  • Y si la familia fuese demasiado reducida para una res de ganado menor, traerá al vecino más cercano a su casa, según el número de personas y conforme a lo que cada cual pueda comer. (Exodo 12, 4)

  • Endureció Yahveh el corazón de Faraón rey de Egipto, el cual persiguió a los israelitas, pero los israelitas salieron con la mano alzada. (Exodo 14, 8)

  • Lo recogían por las mañanas, cada cual según lo que necesitaba; y luego, con el calor del sol, se derretía. (Exodo 16, 21)

  • Todo el pueblo veía la columna de nube detenida a la puerta de la Tienda y se levantaba el pueblo, y cada cual se postraba junto a la puerta de su tienda. (Exodo 33, 10)

  • Por eso, todos los artífices dedicados a los trabajos del Santuario dejaron cada cual su trabajo, (Exodo 36, 4)

  • y en la misma entrada de la Morada de la Tienda del Encuentro colocó también el altar de los holocaustos, sobre el cual ofreció el holocausto y la oblación, como Yahveh había mandado a Moisés. (Exodo 40, 29)

  • o todo aquello sobre lo cual juró en falso. Lo restituirá íntegramente, añadiendo un quinto más, y lo devolverá a quien lo poseía en el día en que se hizo culpable. (Levítico 5, 24)

  • soltará el pájaro vivo fuera de la ciudad, en el campo. De este modo hará expiación por la casa, la cual quedará pura. (Levítico 14, 53)

  • Todo aparejo sobre el cual haya montado el que padece flujo será inmundo. (Levítico 15, 9)

  • Presentará el macho cabrío sobre el cual haya caído la suerte «para Yahveh» ofreciéndolo como sacrificio por el pecado. (Levítico 16, 9)


“Não desperdice suas energias em coisas que geram preocupação, perturbação e ansiedade. Uma coisa somente é necessária: elevar o espírito e amar a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina