Talált 286 Eredmények: Pueblos
Los pueblos son los que se reunieron para destruir el nombre judío. (Ester 10, 8)
Mi pueblo es Israel, que clamó a Dios y fue salvado. Salvó el Señor a su pueblo, el Señor nos liberó de todos estos males; obró Dios grandes señales y prodigios como nunca los hubo en los demás pueblos. (Ester 10, 9)
Por eso, Dios ha marcado dos suertes una para su pueblo y otra para los pueblos restantes; (Ester 10, 10)
y estas dos suertes se han cumplido en la hora, ocasión y día determinados en presencia de Dios y de todos los pueblos. (Ester 10, 11)
«Puesto al frente de muchos pueblos, y siendo señor de toda la tierra, he procurado no dejarme arrastrar por el orgullo del poder, sino gobernar siempre del modo más conveniente y benigno, manteniendo tranquilas en toda ocasión las vidas de mis súbditos, ofreciendo un reino culto y en seguridad hasta sus últimas fronteras y haciendo florecer la paz, tan deseada de todos los hombres. (Ester 13, 2)
Yo oí desde mi infancia, en mi tribu paterna, que tú, Señor, elegiste a Israel de entre todos los pueblos, y a nuestros padres de entre todos sus mayores para ser herencia tuya para siempre cumpliendo en su favor cuanto dijiste. (Ester 14, 5)
fue recibido por nosotros como huésped y tratado con aquella humanidad que nosotros usamos con todos los pueblos, a tal punto que era públicamente llamado «nuestro padre» y había obtenido el segundo puesto en el reino; todos se postraban ante él; (Ester 16, 11)
Levanta a las naciones y luego las destruye, ensancha a los pueblos y luego los suprime. (Job 12, 23)
Pues por ellas sustenta él a los pueblos, les da alimento en abundancia. (Job 36, 31)
Ya como castigo para los pueblos de la tierra, ya como gracia, él los envía. (Job 37, 13)
¿Por qué se agitan las naciones, y los pueblos mascullan planes vanos? (Salmos 2, 1)
(Yahveh, juez de los pueblos.) Júzgame, Yahveh, conforme a mi justicia y según mi inocencia. (Salmos 7, 9)