Talált 425 Eredmények: Primer Libro de Samuel

  • haz el primer querubín en un extremo y el segundo en el otro. Los querubines formarán un cuerpo con el propiciatorio, en sus dos extremos. (Exodo 25, 19)

  • El primer brazo tendrá tres cálices en forma de flor de almendro, con corola y flor; también el segundo brazo tendrá tres cálices en forma de flor de almendro, con corola y flor; y así los seis brazos que salen del candelabro. (Exodo 25, 33)

  • Pondrás cincuenta lazos en el primer tapiz y otros cincuenta en el borde del último tapiz del segundo conjunto, correspondiéndose los lazos unos a otros. (Exodo 26, 5)

  • Harás cincuenta lazos en el borde de la última pieza del primer conjunto, y cincuenta lazos en el borde de la última pieza del segundo conjunto. (Exodo 26, 10)

  • y con el primer cordero, una décima de medida de flor de harina, amasada con un cuarto de sextario de aceite de oliva molida, y como libación un cuarto de sextario de vino. (Exodo 29, 40)

  • Con todo, si te dignas perdonar su pecado..., y si no, bórrame del libro que has escrito.» (Exodo 32, 32)

  • Yahveh respondió a Moisés: Al que peque contra mí, le borraré yo de mi libro. (Exodo 32, 33)

  • Todo lo que abre el seno es mío, todo primer nacido, macho, sea de vaca o de oveja, es mío. (Exodo 34, 19)

  • El primer nacido de asno lo rescatarás con una oveja; y si no lo rescatas, lo desnucarás. Rescatarás todos los primogénitos de tus hijos, y nadie se presentará ante mí con las manos vacías. (Exodo 34, 20)

  • Puso lazos de púrpura violeta en el borde del tapiz con que termina el primer conjunto; los puso también en el borde del tapiz con que termina el segundo conjunto. (Exodo 36, 11)

  • Puso cincuenta lazos en el primer tapiz y otros cincuenta en el borde del último tapiz del segundo conjunto, correspondiéndose los lazos unos a otros. (Exodo 36, 12)

  • Hizo cincuenta lazos en el borde de la última pieza del primer conjunto, y cincuenta lazos en el borde de la última pieza del segundo conjunto. (Exodo 36, 17)


“Uma só coisa é necessária: estar perto de Jesus”. São Padre Pio de Pietrelcina