Talált 486 Eredmények: Arca en el Monte Moriah
Sucedió que unos ocho días después de estas palabras, tomó consigo a Pedro, Juan y Santiago, y subió al monte a orar. (Lucas 9, 28)
Sucedió que al día siguiente, cuando bajaron del monte, le salió al encuentro mucha gente. (Lucas 9, 37)
Comían, bebían, tomaban mujer o marido, hasta el día en que entró Noé en el arca; vino el diluvio y los hizo perecer a todos. (Lucas 17, 27)
Y sucedió que, al aproximarse a Betfagé y Betania, al pie del monte llamado de los Olivos, envió a dos de sus discípulos, (Lucas 19, 29)
Cerca ya de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, llenos de alegría, se pusieron a alabar a Dios a grandes voces, por todos los milagros que habían visto. (Lucas 19, 37)
Alzando la mirada, vió a unos ricos que echaban sus donativos en el arca del Tesoro; (Lucas 21, 1)
Por el día enseñaba en el Templo y salía a pasar la noche en el monte llamado de los Olivos. (Lucas 21, 37)
Salió y, como de costumbre, fue al monte de los Olivos, y los discípulos le siguieron. (Lucas 22, 39)
Nuestros padres adoraron en este monte y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar.» (Juan 4, 20)
Jesús le dice: «Créeme, mujer, que llega la hora en que, ni en este monte, ni en Jerusalén adoraréis al Padre. (Juan 4, 21)
Subió Jesús al monte y se sentó allí en compañía de sus discípulos. (Juan 6, 3)
Dándose cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle por la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al monte él solo. (Juan 6, 15)