Talált 219 Eredmények: salir

  • Moisés hizo salir al pueblo del campamento para ir al encuentro de Dios, y todos se detuvieron al pie de la montaña. (Exodo 19, 17)

  • Yo soy el Señor, tu Dios, que te hice salir de Egipto, de un lugar de esclavitud. (Exodo 20, 2)

  • Entonces ellos sabrán que yo, el Señor, soy su Dios, el que los hice salir de Egipto para habitar en medio de ellos. Yo soy el Señor, su Dios. (Exodo 29, 46)

  • Cuando el pueblo vio que Moisés demoraba en bajar de la montaña, se congregó alrededor de Aarón y le dijo: "Fabrícanos un dios que vaya al frente de nosotros, porque no sabemos qué le ha pasado a Moisés, ese hombre que nos hizo salir de Egipto". (Exodo 32, 1)

  • Él recibió el oro, lo trabajó con el cincel e hizo un ternero de metal fundido. Ellos dijeron entonces: "Este es tu Dios, Israel, el que te hizo salir de Egipto". (Exodo 32, 4)

  • El Señor dijo a Moisés: "Baja en seguida, porque tu pueblo, ese que hiciste salir de Egipto, se ha pervertido. (Exodo 32, 7)

  • Ellos se han apartado rápidamente del camino que yo les había señalado, y se han fabricado un ternero de metal fundido. Después se postraron delante de él, le ofrecieron sacrificios y exclamaron: ‘Este es tu Dios, Israel, el que te hizo salir de Egipto’". (Exodo 32, 8)

  • Pero Moisés trató de aplacar al Señor con estas palabras: "¿Por qué, Señor, arderá tu ira contra tu pueblo, ese pueblo que tú mismo hiciste salir de Egipto con gran firmeza y mano poderosa? (Exodo 32, 11)

  • Ellos me dijeron: ‘Fabrícanos un dios que vaya al frente de nosotros, porque no sabemos qué le ha pasado a Moisés, ese hombre que nos hizo salir de Egipto’. (Exodo 32, 23)

  • El Señor dijo a Moisés: "Vete de aquí, tú y el pueblo que hiciste salir de Egipto, y sube al país que yo prometí con un juramento a Abra- ham, a Isaac y a Jacob, cuando les aseguré que daría esa tierra a sus descendientes. (Exodo 33, 1)

  • Y siempre que iba a presentarse delante del Señor para conversar con él, se quitaba el velo hasta que salía de la Carpa. Al salir, comunicaba a los israelitas lo que el Señor le había ordenado, (Exodo 34, 34)

  • y Moisés entró junto con él en la Carpa del Encuentro. Al salir bendijeron al pueblo, y la gloria del Señor se manifestó a todo el pueblo: (Levítico 9, 23)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina