Talált 59 Eredmények: sale

  • ¡Que se oiga el clamor que sale de sus casas, cuando mandes de repente salteadores contra ellos! Porque han cavado una fosa para atraparme y han ocultado trampas bajo mis pies. (Jeremías 18, 22)

  • Así habla el Señor de los ejércitos: No escuchen las palabras de los profetas que profetizan para ustedes: no hacen más que ilusionarlos, lo que dicen son visiones de su imaginación, no lo que sale de la boca del Señor. (Jeremías 23, 16)

  • A la sombra de Jesbón se detienen los fugitivos exhaustos, pero sale un fuego de Jesbón y una llama de la ciudad de Sijón; ella devora las sienes de Moab y el cráneo de los turbulentos. (Jeremías 48, 45)

  • ¡Oigan! Un clamor sale de Babilonia, un gran estruendo del país de los caldeos. (Jeremías 51, 54)

  • el que envía la luz, y ella sale, la llama, y ella obedece temblando. (Baruc 3, 33)

  • Al borde del torrente, sobre sus dos orillas, crecerán árboles frutales de todas las especies. No se marchitarán sus hojas ni se agotarán sus frutos, y todos los meses producirán nuevos frutos, porque el agua sale del Santuario. Sus frutos servirán de alimento y sus hojas de remedio". (Ezequiel 47, 12)

  • Por eso serán como nube de la mañana, como rocío que pronto se disipa, como paja aventada lejos de la era, como humo que sale por la ventana. (Oseas 13, 3)

  • Porque así habla el Señor, a la casa de Israel: De la ciudad que sale a combatir con mil hombres quedarán sólo cien, y de la que sale con cien no quedarán más que diez para la casa de Israel. (Amós 5, 3)

  • Porque el Señor sale de su Lugar sagrado, desciende y camina sobre las alturas de la tierra. (Miqueas 1, 3)

  • Tus capitanes son como langostas, tus escribas, como un enjambre de insectos, que se posan sobre los cercos en un día de frío. Sale el sol y se escapan, (Nahún 3, 17)

  • Por eso la Ley no tiene vigencia y el derecho no aparece jamás: ¡sí, el impío asedia al justo, por eso sale a luz un derecho falseado! (Habacuc 1, 4)

  • Jesús le respondió: «Está escrito: El hombre no vive solamente de pan, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios». (Mateo 4, 4)


“Peçamos a São José o dom da perseverança até o final”. São Padre Pio de Pietrelcina