Talált 812 Eredmények: muerte de Saúl
Faltaban dos días para la fiesta de la Pascua y de los panes Ácimos. Los sumos sacerdotes y los escribas buscaban la manera de arrestar a Jesús con astucia, para darle muerte. (Marcos 14, 1)
Entonces les dijo: «Mi alma siente una tristeza de muerte. Quédense aquí velando». (Marcos 14, 34)
Los sumos sacerdotes y todo el Sanedrín buscaban un testimonio contra Jesús, para poder condenarlo a muerte, pero no lo encontraban. (Marcos 14, 55)
Ustedes acaban de oír la blasfemia. ¿Qué les parece?». Y todos sentenciaron que merecía la muerte. (Marcos 14, 64)
para iluminar a los que están en las tinieblas y en la sombra de la muerte, y guiar nuestros pasos por el camino de la paz». (Lucas 1, 79)
«El Hijo del hombre, les dijo, debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día». (Lucas 9, 22)
«Señor, le dijo Pedro, estoy dispuesto a ir contigo a la cárcel y a la muerte». (Lucas 22, 33)
ni tampoco Herodes, ya que él lo ha devuelto a este tribunal. Como ven, este hombre no ha hecho nada que merezca la muerte. (Lucas 23, 15)
Por tercera vez les dijo: «¿Qué mal ha hecho este hombre? No encuentro en él nada que merezca la muerte. Después de darle un escarmiento, lo dejaré en libertad». (Lucas 23, 22)
y cómo nuestros sumos sacerdotes y nuestros jefes lo entregaron para ser condenado a muerte y lo crucificaron. (Lucas 24, 20)
Les aseguro que el que escucha mi palabra y cree en aquel que me ha enviado, tiene Vida eterna y no está sometido al juicio, sino que ya ha pasado de la muerte a la Vida. (Juan 5, 24)
Ellos pensaban que hablaba del sueño, pero Jesús se refería a la muerte. (Juan 11, 13)