Talált 205 Eredmények: llanura de Moab
Sobre los techos de Moab y en sus plazas no hay más que lamentos; porque yo he destrozado a Moab como un vaso que nadie quiere -oráculo del Señor-. (Jeremías 48, 38)
¡Cómo ha quedado deshecho! ¡Giman! ¡Con qué vergüenza Moab ha vuelto la espalda! Moab se ha convertido en la risa y el espanto de sus vecinos. (Jeremías 48, 39)
Porque así habla el Señor: ¡Miren! Él planea como un águila, extiende sus alas hacia Moab. (Jeremías 48, 40)
Las ciudades son tomadas, conquistadas las plazas fuertes. El corazón de los valientes de Moab, en ese día, es como el corazón de una parturienta. (Jeremías 48, 41)
Moab ha sido aniquilado como pueblo, por haber desafiado al Señor. (Jeremías 48, 42)
¡Pánico, fosa y red sobre ti, habitante de Moab! -oráculo del Señor-. (Jeremías 48, 43)
El que escape del pánico caerá en la fosa; el que suba de la fosa será atrapado en la red. Porque yo atraeré esto sobre Moab, el año en que tengan que dar cuenta. (Jeremías 48, 44)
A la sombra de Jesbón se detienen los fugitivos exhaustos, pero sale un fuego de Jesbón y una llama de la ciudad de Sijón; ella devora las sienes de Moab y el cráneo de los turbulentos. (Jeremías 48, 45)
¡Ay de ti, Moab! ¡Ha perecido el pueblo de Quemós! Porque tus hijos son llevados prisioneros, y tus hijas al cautiverio. (Jeremías 48, 46)
Pero yo cambiaré la suerte de Moab, en los días futuros -oráculo del Señor-. Hasta aquí el juicio de Moab. (Jeremías 48, 47)
Así habla el Señor: Porque Moab ha dicho: "La casa de Judá es igual que todas las naciones", (Ezequiel 25, 8)
por eso, yo desmantelaré la ladera de Moab, arrasaré de un extremo al otro sus ciudades, las joyas de ese país: Bet Iesimot, Baal Meón y Quiriataim. (Ezequiel 25, 9)