Talált 149 Eredmények: fiesta de la dedicación

  • Al ver esto, Aarón erigió un altar delante de la estatua y anunció en alta voz: "Mañana habrá fiesta en honor del Señor". (Exodo 32, 5)

  • Observarás la fiesta de los Ácimos. Durante siete días comerás panes ácimos, como yo te lo he mandado; y lo harás en el tiempo señalado del mes de Abib, porque en ese mes saliste de Egipto. (Exodo 34, 18)

  • Celebrarás también la fiesta de las Semanas, la de los primeros frutos de la cosecha del trigo; y además, la fiesta de la Recolección, al término del año. (Exodo 34, 22)

  • No ofrecerás nada fermentado junto con la sangre de la víctima sacrificada en mi honor, y no quedará para el día siguiente la víctima inmolada en la fiesta de la Pascua. (Exodo 34, 25)

  • Al cuarto año, todos sus frutos serán consagrados en una fiesta de alabanza al Señor. (Levítico 19, 24)

  • y el quince de ese mismo mes tendrá lugar la fiesta de los Ácimos en honor del Señor. Durante siete días comerán panes sin levadura. (Levítico 23, 6)

  • Habla en estos términos a los israelitas: Además, el día quince de este séptimo mes se celebrará la fiesta de las Chozas en honor del Señor, durante siete días. (Levítico 23, 34)

  • El día quince del séptimo mes, cuando hayan cosechado los productos de la tierra, celebrarán la Fiesta del Señor durante siete días. El primero y el octavo día serán de descanso. (Levítico 23, 39)

  • Así celebrarán la Fiesta del Señor durante siete días cada año, en el séptimo mes. Este es un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones. (Levítico 23, 41)

  • Los jefes presentaron la ofrenda de la dedicación del altar cuando este fue ungido. Y mientras iban presentando sus ofrendas ante el altar, (Números 7, 10)

  • el Señor dijo a Moisés: "Que cada día un jefe ofrezca por turno su ofrenda por la dedicación del altar". (Números 7, 11)

  • Esta fue la ofrenda de los jefes de Israel para la dedicación del altar, el día en que fue ungido: doce fuentes de plata, doce tazones de plata y doce navetas de oro. (Números 7, 84)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina