Talált 2168 Eredmények: enemigos de israel

  • Dan juzgará a su pueblo como una de las tribus de Israel. (Génesis 49, 16)

  • Pero los arcos permanecieron rígidos y se aflojaron los brazos de los arqueros por el poder del Fuerte de Jacob, por el nombre del Pastor, la Roca de Israel; (Génesis 49, 24)

  • Todas estas eran las tribus de Israel -doce en total- y esto es lo que su padre dijo de ellas cuando las bendijo, dándole a cada una su bendición. (Génesis 49, 28)

  • Después dio a los médicos que estaban a su servicio la orden de embalsamar a su padre, y los médicos embalsamaron a Israel. (Génesis 50, 2)

  • Luego hizo prestar un juramento a los hijos de Israel, diciéndoles: "Cuando Dios los visite, lleven de aquí mis restos". (Génesis 50, 25)

  • Es preciso tomar precauciones contra él, para impedir que siga multiplicándose. De lo contrario, en caso de guerra se pondrá de parte de nuestros enemigos, combatirá contra nosotros y se irá del país". (Exodo 1, 10)

  • Entonces los egipcios pusieron a Israel a las órdenes de capataces, para que lo oprimieran con trabajos forzados. Así Israel construyó para el Faraón las ciudades de almacenamiento de Pitóm y Ramsés. (Exodo 1, 11)

  • Ve a reunir a los ancianos de Israel y diles: El Señor, el Dios de sus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, se me apareció y me dijo: ‘Yo los he visitado y he visto cómo los maltrataban los egipcios. (Exodo 3, 16)

  • Ellos te escucharán, y tú irás a presentarte ante el rey de Egipto, junto con los ancianos de Israel. Entonces le dirás: ‘El Señor, el Dios de los hebreos, vino a nuestro encuentro. Y ahora tenemos que realizar una marcha de tres días por el desierto, para ofrecer sacrificios al Señor, nuestro Dios’. (Exodo 3, 18)

  • Entonces tú le dirás: Así habla el Señor: ‘Israel es mi hijo primogénito. (Exodo 4, 22)

  • Inmediatamente, Moisés y Aarón fueron a decir al Faraón: "Así habla el Señor, el Dios de Israel: Deja partir a mi pueblo, para que celebre en el desierto una fiesta en mi honor". (Exodo 5, 1)

  • Pero el Faraón respondió: "¿Y quien es el Señor para que yo le obedezca dejando partir a Israel? Yo no conozco al Señor y no dejaré partir a Israel". (Exodo 5, 2)


“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina