Talált 119 Eredmények: seis
Hubo guerra de nuevo en Gat, y había un hombre de gran estatura que tenía veinticuatro dedos, seis en cada mano y pie. (1 Crónicas 20, 6)
David dijo: «De éstos, veinticuatro mil estarán al frente del servicio de la Casa de Yavé, seis mil serán escribas y jueces; (1 Crónicas 23, 4)
De Jedutún: Los hijos de Jedutún: Guedalías, Serí, Semeí, Isaías, Jasabías y Matatías, seis, bajo la dirección de su padre Jedutún, que profetizaba al son de la cítara para celebrar y alabar a Yavé. (1 Crónicas 25, 3)
Al oriente se nombraban seis levitas por día, al norte cuatro por día, al mediodía, cuatro por día, y en los almacenes de dos en dos; (1 Crónicas 26, 17)
El peso del oro que llegaba a Salomón cada año era de seiscientos sesenta y seis talentos de oro, (2 Crónicas 9, 13)
El trono tenía seis gradas y un peldaño por detrás y brazos a uno y otro lado del asiento con dos leones de pie, junto a los brazos, (2 Crónicas 9, 18)
más doce leones de pie sobre las seis gradas a uno y otro lado. No se había hecho cosa semejante en ningún reino. (2 Crónicas 9, 19)
El año treinta y seis del reinado de Asá subió Basá, rey de Israel, contra Judá, y fortificó a Ramá, para cortar las comunicaciones a Asá, rey de Judá. (2 Crónicas 16, 1)
Joram tenía seis hermanos, hijos de Josafat, que eran: Azarías, Jejiel, Zacarías, Azarías, Miguel y Sefatías. Todos éstos eran hijos de Josafat, rey de Israel. (2 Crónicas 21, 2)
Seis años estuvo escondido en la Casa de Dios, mientras Atalía reinaba en el país. (2 Crónicas 22, 12)
Al cabo de seis meses, los israelitas estuvieron ya instalados en sus ciudades. Entonces se congregó todo el pueblo en Jerusalén. (Esdras 3, 1)
Los judíos que habían vuelto del destierro ofrecieron sacrificios al Dios de Israel: doce novillos por todo Israel, noventa y seis carneros, setenta y siete corderos y doce machos cabríos por el pecado. Todo como víctimas quemadas a Yavé. (Esdras 8, 35)