Talált 316 Eredmények: sacrificio humano

  • Por sugerencia de los habitantes de Tolemaida, se envió un decreto a las ciudades griegas vecinas ordenándoles que procedieran de la misma forma contra los judíos que ahí vivían, y que éstos participaran en el sacrificio. (2 Macabeos 6, 8)

  • Pero él prefirió una muerte honrosa a una vida infame. Fue voluntariamente al sacrificio y lo golpearon hasta que murió. (2 Macabeos 6, 19)

  • Te pido, hijo mío, que mirando al cielo y a la tierra y a cuanto hay en ella, conozcas que de la nada hizo Dios todo esto y también el género humano fue hecho así. (2 Macabeos 7, 28)

  • Efectuó entre sus soldados una colecta y entonces envió hasta dos mil monedas de plata a Jerusalén a fin de que allí se ofreciera un sacrificio por el pecado. Todo esto lo hicieron muy bien inspirados por la creencia de la resurrección, (2 Macabeos 12, 43)

  • Pero creían firmemente en una valiosa recompensa para los que mueren como creyentes; de ahí que su inquietud era santa y de acuerdo con la fe. Esta fue la razón por la cual Judas ofreció este sacrificio por los muertos; para que fueran perdonados de su pecado. (2 Macabeos 12, 45)

  • "Tenía que ofrecer un sacrificio, hoy mismo tuve que pagar mi manda. (Proverbios 7, 14)

  • Yavé aborrece el sacrificio de los malvados, pero acoge con alegría la oración de los justos. (Proverbios 15, 8)

  • Yavé siente horror por el sacrificio de los malvados, sobre todo si ofrecen con una mala intención. (Proverbios 21, 27)

  • La muerte y el mundo de abajo nunca están satisfechos: lo mismo el deseo humano. (Proverbios 27, 20)

  • Mira dónde pisas cuando vayas a la Casa de Dios. Presenta la ofrenda como un hombre prevenido, no como los tontos que ofrecen el sacrificio y no ven que hacen el mal. (Eclesiastés (Qohelet) 4, 17)

  • Y esto es lo que vi: Dios hizo sencillo al ser humano, pero ellos se han buscado mil problemas. (Eclesiastés (Qohelet) 7, 29)

  • Como me dedicara a conocer y observase la condición del hombre en la tierra, vi que el ojo humano no tiene descanso de día ni de noche. (Eclesiastés (Qohelet) 8, 16)


“A caridade é o metro com o qual o Senhor nos julgará.” São Padre Pio de Pietrelcina