Talált 70 Eredmények: muro de protección

  • La burra vio al ángel de Yavé; pasó a rozar el muro, aplastando el pie de Balaam contra la cerca, y Balaam le pegó de nuevo. (Números 22, 25)

  • Cuando construyas una casa nueva, harás alrededor de la azotea un pequeño muro, no sea que alguien se caiga desde arriba y tu casa quede manchada con sangre. (Deuteronomio 22, 8)

  • Después de esto, los bajó con una cuerda por la ventana, ya que su casa estaba pegada al muro de la ciudad. (Josué 2, 15)

  • Colocaron las armas de Saúl en el templo de Astarté y colgaron su cuerpo en el muro de Betsán. (1 Samuel 31, 10)

  • David se atrincheró en la fortaleza y la llamó «Ciudad de David». Después construyó un muro alrededor que, con el tiempo, quedó en el interior de la ciudad. (2 Samuel 5, 9)

  • Ellos me asaltaban el día de mi desgracia, pero Yavé fue mi protección. (2 Samuel 22, 19)

  • Edificó, junto al muro de la Casa, una galería en torno al Santuario y al Lugar Santísimo,e hizo habitaciones laterales alrededor. (1 Reyes 6, 5)

  • Cuatro hombres se hallaban en la entrada de la ciudad, al otro lado del muro. Eran leprosos. Ese día se dijeron: «¿Vamos a quedar aquí hasta morir? (2 Reyes 7, 3)

  • Entonces hicieron una abertura en el muro de la ciudad, y todos los hombres de guerra huyeron de noche por el camino de la puerta entre los dos muros de la quinta del rey, pasando a través de los caldeos, y se fueron por el camino de la estepa. (2 Reyes 25, 4)

  • La Puerta de la Fuente la reparó Salum, hijo de Col José, jefe del distrito de Mizpá; la construyó, la cubrió y fijó sus hojas, barras y bisagras. También restauró el muro del depósito de agua de Siloé, que está junto a la huerta del rey, hasta las escaleras que bajan de la ciudad de David. (Nehemías 3, 15)

  • A continuación los de Tecoa repararon otro sector frente a la torre grande saliente hasta el muro de Ofel. (Nehemías 3, 27)

  • y has tenido compasión de dos hijos únicos. Ten piedad de ellos y dales tu gracia y protección, que toda su vida tengan buena salud y gozo, y vivan en tu gracia.» (Tobías 8, 17)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina