Talált 238 Eredmények: libro abierto

  • El resto de los hechos de Jotam, todas sus guerras y sus obras, están escritas en el libro de los Reyes de Israel y de Judá. (2 Crónicas 27, 7)

  • El resto de sus hechos y todas su obras, del comienzo al fin, están escritos en el libro de los Reyes de Judá e Israel. (2 Crónicas 28, 26)

  • Lo demás referente a Ezequías y sus obras piadosas está escrito en las visiones del profeta Isaías, hijo de Amós, y en el libro de los Reyes de Judá y de Israel. (2 Crónicas 32, 32)

  • Cuando estaban sacando el dinero traído de la Casa de Yavé, el sacerdote Helquías encontró el libro de la Ley de Yavé dada a Moisés. (2 Crónicas 34, 14)

  • Tomó la palabra y dijo al secretario Safán: «He encontrado el libro de la Ley en la Casa de Yavé»; y Helquías entregó el libro a Safán. (2 Crónicas 34, 15)

  • Safán llevó el libro al rey, y le rindió cuentas diciendo: «Tus servidores están haciendo todo lo que les ha sido encargado. (2 Crónicas 34, 16)

  • Luego el secretario Safán anunció al rey: «El sacerdote Helquías me ha entregado un libro.» Y Safán leyó una parte de dicho libro en presencia del rey. (2 Crónicas 34, 18)

  • «Vayan, consulten a Yavé por mí y por el resto de Israel y de Judá, acerca de las palabras del libro que ha sido encontrado. Seguramente Yavé está muy enojado contra nosotros, pues nuestros padres no han guardado la palabra de Yavé y no han obrado conforme a todo lo escrito en este libro.» (2 Crónicas 34, 21)

  • Así habla Yavé: Voy a traer la desgracia sobre este lugar y sobre sus habitantes, conforme a todas las maldiciones escritas en el libro que se ha leído delante del rey de Judá. (2 Crónicas 34, 24)

  • Subió el rey a la Casa de Yavé con todos los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén, los sacerdotes y los levitas, y todo el pueblo desde el mayor hasta el menor, y leyó a sus oídos todas las palabras del Libro de la Alianza que había sido encontrado en la Casa de Yavé. (2 Crónicas 34, 30)

  • El rey se mantuvo de pie sobre su estrado y celebró la Alianza en presencia de Yavé, tomando el compromiso de caminar tras Yavé y guardar sus mandamientos, sus testimonios y sus preceptos con todo su corazón y con toda su alma, cumpliendo las palabras de la Alianza escritas en aquel libro. (2 Crónicas 34, 31)

  • Apartaban lo destinado al holocausto para darlo al pueblo, repartido según las secciones de sus casas paternas, a fin de que lo ofrecieran a Yavé conforme a lo escrito en el Libro de Moisés. Lo mismo se hizo con los bueyes. (2 Crónicas 35, 12)


“Padre, eu não acredito no inferno – falou um penitente. Padre Pio disse: Acreditará quando for para lá?” São Padre Pio de Pietrelcina