Talált 58 Eredmények: efecto

  • Y, en efecto, Yavé castigó al pueblo por el ternero que se fabricaron, el ternero que les hizo Aarón. (Exodo 32, 35)

  • En efecto, Manasés tuvo por herencia, en Isacar y Aser, a Betsán con sus aldeas, a Jeblam con las suyas, a los habitantes de Dor con sus villas, y a los de Endor con sus aldeas; asimismo, a los habitantes de Tanac con sus aldeas, y a los de Meguido con las suyas, y la tercera parte de Nifet. (Josué 17, 11)

  • Ninguna de las promesas de Yavé quedó sin efecto. Todo se realizó. (Josué 21, 45)

  • Estando yo a punto de irme por el camino de toda criatura, les declaro: Reconozcan en su alma y conciencia que todas las promesas de Yavé, nuestro Dios, se cumplieron; ni una ha quedado sin efecto; ni una ha fallado. (Josué 23, 14)

  • Todos los que se encontraban allí dijeron: «En efecto, nosotros somos testigos.» Los ancianos, por su parte, agregaron: «¡Que Yavé te conceda que tu mujer sea como Raquel y Lía, las dos que dieron origen a la familia de Israel! ¡Que seas poderoso en Efrata y famoso en Belén! (Rut 4, 11)

  • En efecto, los sitiados hicieron una salida y mataron a varios hombres y oficiales de David, entre ellos a Urías, el heteo. (2 Samuel 11, 17)

  • fue a Jabés de Galaad a pedirles los huesos de Saúl y de su hijo Jonatán a las autoridades de la ciudad. Ellos, en efecto, los habían retirado de los muros de Bet-San, donde los habían colgado los filisteos el día que mataron a Saúl en Gelboé. (2 Samuel 21, 12)

  • En efecto, David dio esta orden a Joab, jefe de su ejército: «Recorran todas las tribus desde Dan hasta Bersebá, para hacer un censo y que yo sepa cuánta gente tengo.» (2 Samuel 24, 2)

  • Murió en efecto, según lo había dicho Yavé por boca de Elías y, debido a que no tenía hijos, su hermano Joram reinó en su lugar, en el año segundo de Joram, hijo de Josafat, rey de Judá. (2 Reyes 1, 17)

  • Sepan, pues, que no quedará sin efecto ninguna de las palabras que Yavé dijo contra la familia de Ajab. Acaba de cumplirse lo que dijo por boca de su siervo Elías.» (2 Reyes 10, 10)

  • Cada día, en efecto, acudía gente a David para ayudarlo, hasta que el campamento llegó a ser grande, como un campamento de Dios. (1 Crónicas 12, 23)

  • Entonces Eliezer, hijo de Bodavías, de Maresá, profetizó contra Josafat, diciendo: «Porque te has aliado con Ocozías, Yavé ha destruido tus proyectos.» En efecto, las naves fueron destrozadas y no llegaron a Tarsis. (2 Crónicas 20, 37)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina