Talált 225 Eredmények: diez plagas

  • una naveta de oro de diez siclos, llena de incienso; (Números 7, 68)

  • una naveta de oro de diez siclos llena de incienso; (Números 7, 74)

  • una naveta de oro de diez siclos de peso, llena de incienso; (Números 7, 80)

  • Las navetas de oro eran doce, llenas de incienso. Cada naveta era de diez siclos, en siclos del santuario. Los siclos de oro de las navetas sumaban en total ciento veinte. (Números 7, 86)

  • La comerán no sólo uno o dos, o siquiera cinco, diez o veinte días, (Números 11, 19)

  • El pueblo se levantó, y toda esa noche y todo el día siguiente se dedicó a recoger codornices. El que menos tenía había juntado diez grandes medidas. Las pusieron a secar alrededor del campamento. (Números 11, 32)

  • que la desgracia caerá sobre esa gente. Porque vieron mi Gloria y mis maravillas, vieron lo que hice en Egipto y en el desierto, y a pesar de eso me tentaron más de diez veces y no me escucharon. (Números 14, 22)

  • El cuarto día ofrecerán diez novillos, dos carneros y catorce corderos de un año sin defecto, (Números 29, 23)

  • Tomé entonces de entre los jefes de sus tribus hombres sabios y experimentados y los puse al frente de ustedes como jefes de millar, de cien, de cincuenta y de diez, así como también secretarios para cada una de las tribus. (Deuteronomio 1, 15)

  • Y Yavé les dio a conocer su Alianza, en la que les ordenó observar sus diez mandamientos, y los escribió en las dos tablas de piedra. (Deuteronomio 4, 13)

  • Yavé alejará de ti toda enfermedad, no dejará caer sobre ti ninguna de las plagas de Egipto que tú conoces. En cambio, las hará caer sobre aquellos que te odien. (Deuteronomio 7, 15)

  • Yavé escribió en las tablas eso mismo que había en las primeras, las diez palabras que les dijo en el monte desde en medio del fuego, en el día de la Asamblea, y me las dio. (Deuteronomio 10, 4)


O maldito “eu” o mantém apegado à Terra e o impede de voar para Jesus. São Padre Pio de Pietrelcina