Talált 31 Eredmények: común

  • Más bien hemos hecho esto pensando en el porvenir. Acaso algún día sus hijos pregunten a los nuestros: ¿Qué tienen ustedes de común con Yavé, Dios de Israel? (Josué 22, 24)

  • Entonces el rey ordenó al sumo sacerdote Helquías, así como a los sacerdotes de menor grado y a todos los porteros, que sacaran todos los objetos que se habían hecho para Baal, para Asera y para todos los astros del cielo. Los hizo quemar fuera de Jerusalén, en las tierras baldías del Cedrón, y arrojó sus cenizas a la sepultura común del pueblo. (2 Reyes 23, 4)

  • El tronco sagrado que estaba en la Casa de Yavé fue sacado de Jerusalén y llevado al torrente del Cedrón, donde fue quemado y sus cenizas echadas en la fosa común. (2 Reyes 23, 6)

  • Si posteriormente unos u otros quisieran agregar o quitar algo, lo harán de común acuerdo, y lo agregado o quitado tendrá carácter obligatorio. (1 Macabeos 8, 30)

  • Al volver de Persia enfermé de gravedad, por lo que me ha parecido necesario preocuparme de la seguridad común de todos ustedes. (2 Macabeos 9, 21)

  • El Macabeo aceptó la oferta de Lisias, mirando el bien común. En efecto, el rey concedió todo cuanto el Macabeo exigió a Lisias por escrito. (2 Macabeos 11, 15)

  • De común acuerdo, decidieron conmemorar aquella fecha y se fijó como día festivo el día trece del mes doce, llamado Adar en arameo, la víspera del día de Mardoqueo. (2 Macabeos 15, 36)

  • Pero tú, también tendrás tu parte, porque todo lo pondremos en común". (Proverbios 1, 14)

  • El rico y el pobre tienen esto en común, que Yavé hizo a uno y a otro. (Proverbios 22, 2)

  • El pobre y el opresor tienen algo en común: Yavé les da a ambos la luz del día. (Proverbios 29, 13)

  • Soy más estúpido que cualquiera y me falló el sentido común: (Proverbios 30, 2)

  • Tu pueblo iba a vivir la experiencia de un viaje increible, mientras ellos tenían que experimentar una muerte poco común. (Sabiduría 19, 5)


“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina