Talált 16 Eredmények: Susana

  • Se había casado con una mujer llamada Susana, hija de Jilquías, muy bella y temerosa de Dios; (Daniel 13, 2)

  • Cuando a mediodía ya todo el mundo se había retirado, Susana iba a pasear por el jardín de su marido. (Daniel 13, 7)

  • Pero ambos volvieron sobre sus pasos y se encontraron de nuevo en el mismo sitio. Entonces se preguntaron el uno al otro el motivo, se confesaron su pasión y decidieron buscar el momento en que pudieran sorprender a Susana a solas (Daniel 13, 14)

  • Mientras estaban esperando la ocasión favorable, Susana entró un día en el jardín, como los días anteriores, acompañada solamente de las sirvientas jóvenes, y como hacía calor, quiso bañarse en el jardín. (Daniel 13, 15)

  • Susana dijo a sus criadas: «Tráiganme jabón y perfume y cierren las puertas del jardín para poder bañarme.» (Daniel 13, 17)

  • Ellas obedecieron, cerraron las puertas del jardín y salieron por la puerta lateral para traer lo que Susana había pedido. No sabían que los ancianos estaban escondidos (Daniel 13, 18)

  • Susana exclamó gimiendo: «Me encuentro sitiada por todos lados. Si consiento, es como morir; si no consiento, no me libraré de las manos de ustedes. (Daniel 13, 22)

  • Y Susana se puso a gritar muy fuertemente. Los dos ancianos gritaron también contra ella, (Daniel 13, 24)

  • Y cuando los ancianos contaron su historia, los sirvientes se sintieron muy avergonzados, porque jamás se había dicho de Susana cosa semejante (Daniel 13, 27)

  • A la mañana siguiente, cuando el pueblo se reunió en casa de Joaquín, su marido, llegaron allá los dos ancianos, llenos de pensamientos perversos contra Susana, para hacerla condenar a muerte. (Daniel 13, 28)

  • Y dijeron en presencia del pueblo: «Manden a buscar a Susana, hija de Jilquías, la esposa de Joaquín.» (Daniel 13, 29)

  • Susana era muy fina y de gran belleza. (Daniel 13, 31)


“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina