Talált 82 Eredmények: Leví

  • Los reuní cerca del río que corre hacia Ahavá, y acampamos allí tres días; y habiendo buscado entre el pueblo, no encontré ninguno de la tribu de Leví. (Esdras 8, 15)

  • Como la bondadosa mano de Dios estaba con nosotros, nos trajeron a Serebías, hombre muy sensato, de entre los hijos de Majlí, hijo de Leví, hijo de Israel, y con él sus hijos y sus hermanos, en número de dieciocho; (Esdras 8, 18)

  • Los hijos de Leví, jefes de familia, fueron registrados en el Libro de las Crónicas, hasta el tiempo de Yojanán, nieto de Elyasib. (Nehemías 12, 23)

  • casa de Leví, bendigan al Señor, los que temen al Señor, que lo bendigan. (Salmos 135, 20)

  • Dios elevó y consagró igual que a él a su hermano Aarón, de la tribu de Leví. (Sirácides (Eclesiástico) 45, 6)

  • Habrá tres puertas al norte: la puerta de Rubén, la de Judá y la de Leví (pues las puertas de la ciudad recibirán los nombres de las tribus de Israel). (Ezequiel 48, 31)

  • La familia de Natán, por su cuenta, y lo mismo sus mujeres; la familia de Leví, en su casa, y lo mismo sus mujeres; la familia de Semeí aparte y lo mismo sus mujeres. (Zacarías 12, 13)

  • Y comprobarán que yo he sido quien les hizo esta advertencia para restaurar mi alianza con Leví, declara Yavé de los Ejércitos. (Malaquías 2, 4)

  • Purificará a los hijos de Leví y los refinará como se hace con la plata. Como el oro y la plata, volverán a ser auténticos y dignos de ofrecer a Yavé la ofrenda como es debido. (Malaquías 3, 3)

  • Mientras caminaba, vio a un cobrador de impuestos sentado en su despacho. Era Leví, hijo de Alfeo. Jesús le dijo: «Sígueme.» Y él se levantó y lo siguió. (Evangelio según San Marcos 2, 14)

  • Jesús estuvo comiendo en la casa de Leví, y algunos cobradores de impuestos y pecadores estaban sentados a la mesa con Jesús y sus discípulos; en realidad eran un buen número. Pero también seguían a Jesús (Evangelio según San Marcos 2, 15)

  • hijo de Matat, hijo de Leví, hijo de Melquí, hijo de Janaí, hijo de José, (Evangelio según San Lucas 3, 24)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina