Talált 396 Eredmények: Hermano

  • Si tu hermano pasa necesidad y ves que no puede salir del apuro, ayúdalo, aunque sea forastero o huésped, para que pueda vivir junto a ti. (Levítico 25, 35)

  • No tomarás de él interés ni usura; antes bien, teme a tu Dios y haz que tu hermano pueda vivir junto a ti. (Levítico 25, 36)

  • Así que no te pondrás duro con tu hermano, sino que temerás a tu Dios. (Levítico 25, 43)

  • Si el extranjero o el forastero que vive contigo adquiere bienes, y en cambio tu hermano se empobrece al lado de él y se vende al extranjero o al forastero, o al descendiente de la familia del extranjero, (Levítico 25, 47)

  • aunque sea de su padre o madre, de su hermano o hermana; en pocas palabras, si a ésos les toca morir, no se hará impuro por cuanto tiene en su cabeza la consagración a su Dios. (Números 6, 7)

  • "Toma tu varilla y junto con hermano Aarón reúne a toda la comunidad. Y a la vista de todos le dirás a la roca que dé agua. Harás que brote para ellos agua de la roca y se la darás a beber a la comunidad y a su ganado". (Números 20, 8)

  • Desde Cadés, Moisés mandó a decirle al rey de Edom: "Así habla tu hermano Israel. Tu sabes de todas las dificultades con que nos hemos topado. (Números 20, 14)

  • Si tampoco los hay, darán la herencia al hermano de su padre. (Números 27, 10)

  • Cuando la hayas visto, irás a reunirte tú también a tu pueblo, como tu hermano Aarón. (Números 27, 13)

  • «Yavé te mandó que dieras la tierra en herencia por suertes a los hijos de Israel y recibiste orden de Yavé de dar la herencia de Selofjad, nuestro hermano, a sus hijas. (Números 36, 2)

  • Entonces di a los jueces las siguientes instrucciones: 'Ustedes atenderán las quejas de sus hermanos, y decidirán, sea que el pleito oponga un israelita a su hermano, o bien un israelita a uno de los extranjeros que viven en medio de nosotros. (Deuteronomio 1, 16)

  • Si tu hermano, hijo de tu padre, si tu hijo o tu hija, o la mujer que descansa en tu regazo o el amigo a quien amas tanto como a ti mismo, trata de seducirte en secreto, diciéndote: «Vamos a servir a otros dioses», dioses que no conociste ni tú ni tus padres, (Deuteronomio 13, 7)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina