Talált 227 Eredmények: Envió

  • Entonces Amasías envió mensajeros a Joás, hijo de Joacaz, hijo de Jehú, rey de Israel, para decirle: «Sube y veremos cuál de los dos puede más.» (2 Reyes 14, 8)

  • Entonces el rey Ajaz fue a Damasco para entrevistarse con Teglatfalasar, rey de Asur, y, viendo el altar que había en Damasco, envió al sacerdote Urías las medidas de este altar junto con un dibujo que lo representaba exactamente en todos sus detalles. (2 Reyes 16, 10)

  • Al principio, cuando se establecieron allí, no veneraban a Yavé, y Yavé envió contra ellos leones que mataron a muchos. (2 Reyes 17, 25)

  • En aquel tiempo, Merodac-Baladan, hijo de Baladan, rey de Babilonia, envió cartas y un regalo a Ezequías porque supo que había estado enfermo. (2 Reyes 20, 12)

  • Yavé envió contra Joaquim bandas de guerreros caldeos, de arameos, de moabitas y de amonitas; los envió contra el país de Judá para arruinarlo según la palabra que había dicho por boca de sus siervos los profetas. (2 Reyes 24, 2)

  • Hiram, rey de Tiro, envió a David mensajeros y maderas de cedro y también albañiles y carpinteros para edificarle una casa. (1 Crónicas 14, 1)

  • envió a Hadoram, su hijo, donde el rey David para saludarlo y para felicitarlo por haber atacado y vencido a Hadadezer, ya que Toú estaba en guerra con Hadadezer. Hadoram traía toda clase de objetos de oro, de plata y de bronce. (1 Crónicas 18, 10)

  • Entonces David dijo: «Tendré con Janún, hijo de Najás, la misma benevolencia que su padre tuvo conmigo», y envió David mensajeros para que lo consolaran por la muerte de su padre. Pero cuando los servidores de David llegaron al país de Ammón, donde Janún, para consolarlo, (1 Crónicas 19, 2)

  • David supo lo que les había pasado y envió gente a su encuentro ya que venían muy avergonzados. El rey dijo: «Quédense en Jericó hasta que les crezca la barba, y después vuelvan.» (1 Crónicas 19, 5)

  • David lo supo, y envió a Joab con toda la tropa y con los valientes. (1 Crónicas 19, 8)

  • Yavé, pues, envió la peste sobre Israel y murieron setenta mil hombres. (1 Crónicas 21, 14)

  • Si yo cierro el cielo para que no llueva, si yo mando a la langosta devorar la tierra, o envío la peste contra mi pueblo; (2 Crónicas 7, 13)


Uma filha espiritual perguntou a Padre Pio: “O Senhor cura tantas pessoas, por que não cura esta sua filha espiritual?” Padre Pio respondeu-lhe em voz baixa: “E não nos oferecemos a Deus?” São Padre Pio de Pietrelcina