Talált 324 Eredmények: Armadura de Saúl

  • Todos los hombres de Israel, que estaban en el valle, vieron que las tropas de Israel se daban a la fuga y que Saúl y sus hijos habían muerto. Entonces abandonaron sus ciudades y huyeron; vinieron los filisteos y se establecieron en ellas. (1 Crónicas 10, 7)

  • Al otro día vinieron los filisteos para despojar a los muertos,y encontraron a Saúl y a sus hijos caídos en el monte Gelboé. (1 Crónicas 10, 8)

  • Depositaron las armas de Saúl en el templo de sus dioses y clavaron su cráneo en el templo de Dagón. (1 Crónicas 10, 10)

  • Todos los habitantes de Jabés de Galaad supieron lo que los filisteos habían hecho con Saúl, (1 Crónicas 10, 11)

  • se levantaron todos los valientes, tomaron el cadáver de Saúl y los de sus hijos, y los llevaron a Jabés. Enterraron sus huesos bajo el terebinto de Jabés, y ayunaron siete días. (1 Crónicas 10, 12)

  • Saúl murió a causa de la infidelidad que había cometido contra Yavé, porque no guardó la palabra de Yavé, y también por haber interrogado y consultado a los espiritistas. (1 Crónicas 10, 13)

  • Ya antes, cuando Saúl era nuestro rey, eras tú el que dirigía a Israel; Yavé, tu Dios, te ha dicho: Tú apacentarás a mi pueblo Israel, tú serás el jefe de mi pueblo Israel.» (1 Crónicas 11, 2)

  • Estos son los que vinieron a juntarse con David, en Siquelag, mientras se mantenía alejado de Saúl, hijo de Quis; estaban entre los guerreros de refuerzo para los combates. (1 Crónicas 12, 1)

  • Manejaban el arco y la honda lo mismo con la derecha que con la izquierda para tirar flechas y lanzar piedras. De los hermanos de Saúl, el benjaminita: (1 Crónicas 12, 2)

  • También de Manasés se pasaron algunos a David, cuando éste iba con los filisteos al combate contra Saúl, si bien no peleó al lado de ellos; porque los príncipes de los filisteos después de haberlo hablado entre ellos, lo hicieron volver, diciendo: «A costa de nuestra vida, este hombre se reconciliará con Saúl su señor.» (1 Crónicas 12, 20)

  • Este es el número de los guerreros preparados para la guerra que vinieron donde David, a Hebrón, para transferirle el reino de Saúl, conforme a la orden de Yavé. (1 Crónicas 12, 24)

  • De los hijos de Benjamín, hermano de Saúl, tres mil: hasta entonces la mayor parte de ellos habían permanecido fieles a la familia de Saúl. (1 Crónicas 12, 30)


“Somente por meio de Jesus podemos esperar a salvação.” São Padre Pio de Pietrelcina