Talált 115 Eredmények: Altísimo
Y tú, niño, serás llamado Profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor para preparle sus caminos, (Evangelio según San Lucas 1, 76)
Amen a sus enemigos, hagan el bien y presten sin esperar nada a cambio. Entonces la recompensa de ustedes será grande, y serán hijos del Altísimo, que es bueno con los ingratos y los pecadores. (Evangelio según San Lucas 6, 35)
Al ver a Jesús se puso a gritar y se echó a sus pies. Le decía a voces: «¿Qué quieres conmigo, Jesús, hijo del Dios Altísimo? Te lo ruego, no me atormentes.» (Evangelio según San Lucas 8, 28)
En realidad, el Altísimo no vive en casas fabricadas por manos de hombres, como dice el Profeta: (Hecho de los Apóstoles 7, 48)
Empezó a seguirnos y a Pablo gritando: «Estos hombres son siervos del Dios Altísimo y les anuncian el camino de la salvación.» (Hecho de los Apóstoles 16, 17)
Se sabe que Melquisedec, rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, salió al encuentro de Abrahán cuando volvía de derrotar a los reyes; bendijo a Abrahán (Carta a los Hebreos 7, 1)
Insultaron al Dios Altísimo a causa de sus dolores y de sus llagas, pero no se arrepintieron ni dejaron de hacer el mal. (Apocalipsis 16, 11)