22. Ezequías habló al corazón de todos los levitas, que demostraban tener perfecto conocimiento de Yavé. Celebraron la solemnidad durante siete días sacrificando sacrificios de comunión y alabando a Yavé, el Dios de sus padres.





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina