Judit, 16
25. Mientras vivió Judit, nadie amenazó a Israel, y ni siquiera en mucho tiempo después de su muerte.
25. Mientras vivió Judit, nadie amenazó a Israel, y ni siquiera en mucho tiempo después de su muerte.
“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina