II Crónicas, 29
9. Por eso, nuestros padres cayeron en la guerra, y nuestros hijos y nuestras mujeres fueron hechos prisioneros.
9. Por eso, nuestros padres cayeron en la guerra, y nuestros hijos y nuestras mujeres fueron hechos prisioneros.
“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina